Si Túpac Amaru viviera, le dirían Anti minero, Terrorista y lo tendrían preso o muerto.
(18/05/2015)Desde aquel día del sacrificio del 18 de mayo de 1781 han pasado 235 años al día de hoy, pero las cosas no han cambiado en nuestro país, pareciera que no tuvimos independencia o es que esta nos la regalaron. A casi dos siglos y medio los problemas sociales son los mismos, mientras la mayoría de peruanos, en el caso del valle del Tambo quiere desarrollarse económicamente en base al agro; viene un grupo extranjero, una minera transnacional que en alianza con la clase política dominante imponen a sangre y fuego el negocio que les es más rentable a su círculo, sin considerar el bienestar de las mayorías.
Túpac Amaru precisamente reclamó la imposición de la mita (trabajo minero forzado) a los indios; y pedía que ellos regresen a su actividad que siempre les dio bienestar, que en ese entonces era la agricultura y la ganadería.
Frente a esto la colonia comandado por el virrey emprendieron una dura persecución a José Gabriel Condorcanqui, por liderar revueltas en contra del sistema colonial de explotación principalmente minera. En ese paralelo hoy vemos situaciones similares donde los grupos de poder con su herramienta, la presión mediática, acorralan al gobierno de turno y lo fidelizan a los interés foráneos; en este esquema incriminan, enjuician, encarcela y en algunos caso quitan la vida a balazo limpio a dirigentes y manifestantes que se oponen al proyecto minero de Tía María, en el sur del Perú.
De igual forma después de largos meses de rebeldía, toman prisionero a Túpac Amaru, y ajustician un día como hoy 18 de mayo en la plaza de armas de la ciudad de cusco, atándole a cuatro caballos que halaran de sus extremidades, todo este vejamen en presencia del pueblo de Cusco, de sus hijos y de su esposa Micaela Bastidas, quienes horas más tarde correrían igual suerte. Acto salvaje que lo hicieron en público para evitar que generaciones nuevas intenten levantar la cabeza ante la opresión.
Hoy Túpac Amaru es un héroe de brillo continental, un icono de la liberación de los pueblos en el mundo; sin embargo creemos que si Túpac Amaru viviera en estos días en el Perú republicano que tenemos, de seguro que estaría en alguna mazmorra tras de unos barrotes o probablemente en la lista del cerca de medio centenar de muertos en conflictos sociales que van en sólo este último gobierno.
Desde hace 25 años el Perú de hoy abraza un modelo fanatizado de desarrollo denominado neoliberalismo, consistente en la explotación con facilidades tributarias los recursos mineros, imponiendo esta actividad a punta de plomo, a todo aquel que se cruce en este negocio. Los operadores de esta corriente son una minoría poblacional, pero con alto poder estratégico en el poder, dominan los medios de comunicación, por ende la política y lo que acarrea esto; en detrimento de las grandes mayorías que viven oprimidas como en tiempos de la colonia. Han pasado 235 años del día del sacrificio de Túpac Amaru y las cosas no han cambiado.
Un punto aparte. Desde el portal Quechua recordamos este fatídico día 18 de mayo de 1781, fecha gris para nuestro idioma quechua, pues una de las consecuencias de este día fue la prohibición de la enseñanza1 del quechua en todo el virreinato y la iglesia que por aquellos años se impartía en la Universidad de San Marcos y en algunos conventos. Hoy 235 años el estado republicano aun no levanta este veto, aún hay reticencia en poner al idioma de los incas en la curricula escolar de nuestro país, probablemente por los mismos temores de los virreyes, hoy llamados presidentes.
1.El decreto de Areche que siguió a la ejecución de Túpac Amaru II incluyó la prohibición de la lengua quechua, el uso de ropas indígenas, y virtualmente cualquier mención o conmemoración de la cultura incaica y de su historia.